A pleno, y a muy cerca de su desborde hacia el río Sauce Grande, se encontraba ayer el dique Paso de las Piedras, con una cota a menos de 70 centímetros de su nivel máximo. Si bien todas las miradas parecen dirigidas a la presa -que no fue habilitada en 1972 para regular crecidas sino abastecer de agua a las poblaciones de Bahía Blanca y Punta Alta-, pocos hablan o hacen alusión al desastroso estado del cauce del río Sauce Grande, sobre todo entre el dique y la laguna Sauce Grande.
Falto de mantenimiento desde largos años, en dicho tramo, por parte de la Dirección Provincial de Hidráulica, apenas se encuentra en condiciones de absorber unos 3 m3 por segundo de agua sin producir desbordes, caudal que con una lluvia grande y el dique desbordado por el vertedero será superado con creces.
Incluso, pese a las afirmaciones del intendente de Monte Hermoso sobre las obras de canalización encaradas en ese distrito años atrás, pudo saberse que el paso del tiempo hizo que en varios tramos la profundización se haya perdido.
Por estas horas todos saben que ante una gran precipitación en las sierras, acompañada incluso por otras similares en las cuencas medias y baja del río, serán miles las hectáreas que quedarán inundadas y su escurrimiento se verá demorado por la escasa profundidad del cauce.
¿Las cifras? Si bien nadie sabe a ciencia cierta cómo reaccionará el cauce embancado del río en varios de sus tramos, productores agropecuarios y técnicos coinciden en que las consecuencias no serán buenas, dependiendo esto del régimen de precipitaciones de acá a los próximos meses y de las acciones oficiales que se tomen.
En 1997/98, cuando se buscaba bajar la cota a 157 metros sobre el nivel del mar para proceder a la reparación de la presa, desde el dique se desembalsaron 15 m3/s a través de su descargador de fondo, cuya capacidad puede llegar a los 200 m3/s, con la compuerta abierta por completo.
Hoy por hoy, ya resulta bastante tarde intentar la limpieza y canalización del Sauce Grande, fundamentalmente entre Las Oscuras y la laguna, mientras que una apertura controlada de las compuertas mayor a los 3 o 4 centímetros, que descargará unos 3 m3/ por segundo, seguramente se traducirá en no pocas zonas anegadas, y apenas servirá para bajar un centímetro diario la cota del embalse.
Frente a este escenario, solo resta esperar que la naturaleza acompañe con lluvias escasas, algo impensado años atrás.
Fuente: Adrián Luciani – La nueva.com
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