pescando directamente en la zona protegida, nos preguntábamos a modo de reflexión ¿Cómo es posible que la Prefectura no los detecte? Dado que el jefe de la Prefectura Salto Grande no atendió a DIARIOJUNIO tras insistentes llamados, nos encargamos de buscar explicaciones en el propio curriculum vitae del prefecto Daniel Bonifacini, y encontramos una posible razón. Tal como lo probamos en el informe que puede leerse en este link: http://www.diariojunio.com.ar/noticias.php?ed=1&di=0&no=51757 , el oficial de prefectura especializado en la agrupación Albatros, es aficionado a la caza de animales mayores. En base a esto, sugerimos que la razón por la que Bonifacini permitía la pesca furtiva en la zona protegida que estaba a su cargo, podía ser motivada por una sensación de empatía con los predadores. Pero a poco de publicada la noticia, comenzaron a surgir nuevas puntas de investigación: Personal de Prefectura, marineros y suboficiales, que pidieron la reserva de su identidad para preservar su empleo, pero que aportaron pruebas que convalidan sus dichos, denunciaron ante nuestros cronistas que; “Bonifacini les cobra a los pescadores para liberarles la zona, y a los marineros nos manda a hacer guardia aguas abajo, nos dice que volvamos a tal hora entonces queda liberada la zona de exclusión”. La foto que publicamos en esta nota fue tomada por un marinero indignado porque –según afirmó- luego de realizar un secuestro de redes y dorados, “el jefe nos ordenó que lo dejáramos ir nomas, ese operativo lo manejó Mariano Aguirre que es el titular de Inteligencia, y él nos dijo que no labráramos el acta contra el pescador porque colaboraba con datos, pero nos hizo descargar 40 dorados del bote, que fueron a parar al quincho donde comen los jefes”. Según una de estas fuentes, “no hay forma de denunciar esto sin quedarte sin trabajo, porque vas más arriba y le avisan a él igual, Aguirre es el encargado de las denuncias internas y es el que se quedó con los dorados, y para que no te den de baja vos necesitas que el jefe mande informes positivos, y si lo denuncias él manda un informe negativo y te quedaste sin trabajo, por eso hay más obediencia a las órdenes que a las leyes en la Prefectura”. Además, acusaron al prefecto por el supuesto uso indebido de los recursos de la fuerza: “Usa la camioneta como vehículo personal, se hace llevar hasta La Tigra o al Palmar en Colón para ir a cazar, y después se trae los bichos en la camioneta de Prefectura” afirmaron. En diálogo informal con DIARIOJUNIO, Bonifacini negó rotundamente las acusaciones, aunque manifestó que requería autorización de la superioridad para brindar una respuesta oficial sobre el tema.“Si alguien le dice que no sabe nada en Salto Grande le está mintiendo, porque todo el mundo sabe lo que pasa” dijo el primero de los entrevistados, un joven marinero que asegura que “es imposible que el segundo jefe no lo sepa, es imposible que no lo sepa alguien, porque los vemos pescando siempre, están ahí, vemos cuando entran los pescados, cuando hacen los agasajos, lo que pasa es que en la fuerza se respeta más la subordinación a los rangos que a las leyes”
El joven habla y los ojos se le pierden en el horizonte, como cuando se recuerdan imágenes, acontecimientos. Indignado cuenta que “hay tipos a los que no los podemos tocar, salimos a la guardia y ya se sabe que hay que dejarlos pescar nomás, porque está arreglado, te vas dando cuenta porque los detenés una vez, dos veces y no pasa nada, lo ves que se va nomás y sigue pescando y te empiezan a mandar para otra zona, solamente se secuestra las redes pero ninguno de mis compañeros ha visto alguna vez que se destruyeran las redes, y los tipos tienen las redes cada vez más largas”
Este marinero, que es quien ofreció una fotografía tomada a escondidas con un teléfono celular durante un procedimiento, afirma además que; “este de la foto es el ruso, le dicen así pero es uruguayo, aunque tiene doble nacionalidad, es también nacionalizado argentino, y el tipo pesca en la zona protegida, con redes, y tiene antecedentes incluso, pero no pasa nada, en ese procedimiento lo enganchamos con cerca de 80 dorados, de 10, 12 o a lo sumo 15kg, y vino el jefe de Inteligencia que es Mariano Aguirre, con la orden de que lo largáramos nomás porque supuestamente colaboraba con él aportándole información sobre los otros pescadores furtivos, ahí. Aguirre se hizo dejar 40 dorados, los más grandes que había en el bote y lo tuvimos que llevar hasta la base de la prefectura, supuestamente era un secuestro pero no se hizo ningún acta de eso, sino que se los deja en unos freezers que hay en el pañol, y queda a disposición de los jefes, o de los generales, que vienen de vacaciones a la casita”
Según este uniformado, “el problema es que detrás de cada uno de nosotros hay una familia, entonces yo no puedo denunciarlos con mi nombre porque te echan, te dan de baja enseguida, no podes hacer nada, si los denuncias con un superior, el superior le avisa que lo denunciaste, se cubren entre ellos y nunca llega eso a la cúpula”
Zonas liberadas
La zona de protección, aguas debajo de la represa está señalizada por un cartel, y se extiendo 1000 metros hacia el sur de la represa. Según precisa otra fuente, “hay algunos que van en sus lanchas, o botes, por la tortuga, esos casi todos pescan con red, pero otros van a pescar con real directamente en la zona de exclusión, se meten por el campo el alambrado, por un camino que hay desde la 015, a la altura del puente, pasando el arca de Enrimir, y van costeando el río” y algunos “desde la misma represa, pescan”.
De acuerdo a lo manifestado por este uniformado, en consonancia con lo señalado por el marinero, “hay guardias que el jefe te dice que salgar a patrullar aguas abajo y no vuelvas hasta determinado horario, liberando la zona para los pescadores”
Otro de los redistas conocidos es “carita de laucha” Serrano, “ese también ya ahora hace rato que no lo vemos, pero sabemos que sigue pescando, solo que no lo podemos enganchar por estas razones, y si lo enganchamos seguro que tenemos que dejarlo ir” precisó otro de los prefecturianos, para coincidir con las acusaciones vertidas por Bradanini en su muro de Facebook, donde señala a Serrano como un pescador de redes que a diario retira entre 300 y 400 dorados, para luego comercializarlos incluso en algunas oportunidades “he encontrado los doradas faenados en la playa” señaló Bradanini.
LA CASITA
Según refieren los subordinados, la casita es una casaquita que puede observarse en la imagen satelital, y que posee un quincho de importantes proporciones donde según señalan los prefecturianos entrevistados por DIARIOJUNIO, “se hacen los almuerzos y cenas de los jefes y generales cuando vienen”. La particularidad de estos agasajos, que se realizan cada vez que un general de la Fuerza visita la base, ya sea para inspeccionar, o –como en la mayoría de los casos- para descansar, es que suelen presentarse de plato principal, “dorados de la zona de exclusión, o animales que el prefecto Bonifacini caza con arco y flecha”.
“el va a cazar al Palmar, caza jabalíes, y se hace llevar en la camioneta de la prefectura, y con custodia. Tiene un sistema que va dos veces antes de disparar una sola flecha, va y les deja comida a los animales, y a la tercer vez se queda todo un día y se viene con un bicho de esos, lo carga en la caja de la camioneta y nadie le dice nada porque es la camioneta de Prefectura, y esos bichos también los hacen a la parrilla”
A esos banquetes, se accede perteneciendo al selecto círculo de los jefes, y los suboficiales y marineros, son quienes cocinan, y hacen de mozos para esas ocasiones.
BONIFACINI NEGÓ TODO
Consultado por las acusaciones, Bonifacini se limitó a negar rotundamente todo, pero aclaró que para explayarse en una respuesta debía pedir autorización a "la superioridad", refiriéndose a sus jefes.
Fuente-http://www.diariojunio.com.ar/noticias.php?ed=1&di=0&no=51819
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